Explorando los beneficios de la fototerapia: Afecciones cutáneas, trastornos del estado de ánimo y cicatrización de heridas

Artículo Original: https://www.medscape.com/viewarticle/phototherapy-how-light-helping-patients-heal-new-ways-2024a1000epe

La fototerapia, o terapia de luz, es un método de tratamiento que utiliza diversos tipos de luz para tratar una serie de afecciones médicas. Ha ido ganando atención por su eficacia en el tratamiento de afecciones cutáneas, trastornos del estado de ánimo y cicatrización de heridas.

Tratamiento de afecciones cutáneas

La fototerapia se utiliza habitualmente para tratar afecciones cutáneas como el eccema y la psoriasis. La fototerapia ultravioleta (UV), que consiste en exponer la piel a la luz ultravioleta, ha demostrado un alto índice de éxito. Los estudios indican que aproximadamente el 70-80% de los pacientes con psoriasis experimentan una mejora significativa tras someterse a la fototerapia UV. Este tratamiento ayuda a reducir la inflamación y frenar el rápido crecimiento de las células cutáneas.

Control del trastorno afectivo estacional (TAE)

La fototerapia también es eficaz para las personas que sufren Trastorno Afectivo Estacional (TAE), un tipo de depresión que suele aparecer durante los meses de invierno, cuando hay menos luz solar natural. La fototerapia consiste en sentarse frente a una caja de luz especial que imita la luz solar natural. Las investigaciones sugieren que entre el 50 y el 60% de las personas con TAE experimentan una mejoría de sus síntomas después de utilizar la fototerapia con regularidad. También se ha demostrado que puede ser beneficiosa para las personas que utilizan insulina.

Mejora de la cicatrización de heridas

Entre los avances recientes en fototerapia se incluye su uso para acelerar la cicatrización de heridas. Algunos estudios han descubierto que la fototerapia puede acelerar el proceso de cicatrización de las heridas en un 30-40%. Esto se consigue estimulando la reparación celular y reduciendo la inflamación en la zona afectada.

En resumen, la fototerapia aprovecha la luz para ayudar a tratar diversas afecciones, desde enfermedades cutáneas y depresión estacional hasta la mejora de la cicatrización de heridas. Su eficacia en estos ámbitos la convierte en una valiosa herramienta de la medicina moderna.